Por qué deberías cerrar siempre el contenedor de basura
Hay múltiples razones por las que poner en práctica y convertir en hábito la acción de cerrar la tapa de un contenedor. Aquí nos encontramos con varios colectivos: los que lo hacen bien, los que lo hacen mal y los que, directamente, no lo hacen, porque dejan sus desechos en la calle, al pie del contenedor, en una demostración de poca ciudadanía.
Te vamos a dar cinco razones de por qué deberías bajar siempre la tapa del contenedor. Y, a lo mejor, quién sabe, también una buena excusa para empezar a reciclar.
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HIGIENE. En un solo contenedor pueden almacenarse hasta 200 kilos de restos de todo tipo. Y aunque los contenedores de la fracción resto/orgánico se recogen casi todos los días, el interior se convierte en una “fiesta” de bacterias que tienen posibilidad de irse de paseo si les damos una salida. Por eso es importante no echar nunca basura a granel y siempre hacerlo en bolsas bien cerradas.
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OLORES. Nadie quiere un contenedor a la puerta de su casa, principalmente por el olor. Ese "tufillo" que ya es molesto de forma habitual, en verano se puede llegar a hacer insoportable si tenemos supermercados, carnicerías o pescaderías cerca que depositan los restos de productos en mal estado sin embolsar. Ponte en lugar de tu vecino, si tuvieras un contenedor cerca de tu ventana, te gustaría que la tapa estuviera siempre cerrada.
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PROLIFERACIÓN DE ANIMALES E INSECTOS. Un contenedor abierto o bolsas al pie de los recipientes son como invitaciones a un buffet libre para gatos y perros abandonados. Los animales convierten ese punto en su principal fuente de alimentación (poco saludable) y colonizan el barrio. Y con los insectos (cucarachas, moscas, mosquitos, etc), ocurre un efecto similar. Mantén las plagas lejos de tu hogar.
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POR ESTÉTICA E IMAGEN DEL PUEBLO. ¿Qué dirían de ti tus vecinos o cualquier turista que visite el pueblo si tu casa está en mal estado, llena de manchas, grafitis o carteles, y emana un halo de inmundicia? El contenedor es un mobiliario urbano y su estado dice mucho de las personas que hacen uso de él en cada jornada. Una calle con contenedores bien mantenidos, ubicados correctamente y con tapas cerradas es símbolo de orden y limpieza. Será agradable para ti y para los que te visitan.
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POR DINERO. ¿Sabías que el papel y cartón que echas en el contenedor azul vale menos si se moja? ¿O que tus envases valen menos si el contenedor amarillo está abierto? Cuando reciclas envases, latas, briks o papel y cartón, los centros de tratamiento o gestores autorizados te pagan por el trabajo realizado. Ese dinero sirve para financiar los costes de la recogida (los salarios de conductores y operarios, su vestuario laboral, los camiones, el gasoil, etc) para que en tu recibo pagues lo menos posible. Cuanto más material reciclemos entre todos más dinero obtendremos. Y si los desechos reciclables no van mezclados con basura, incrementamos los ingresos, la calidad también puntúa. Porque reciclar, y hacerlo bien, tiene su premio.
Mándale este post a esa persona que siempre se olvida de bajar la tapa del contenedor. Seguro que después de leer esto se acuerda.