¿Por qué tu empresa no puede usar los contenedores urbanos para residuos no domésticos?
La tentación de utilizar los contenedores urbanos (las "islas de reciclaje") para deshacerse de volúmenes grandes o de materiales complejos es alta. Pero hacerlo no solo es ilegal, sino que pone en riesgo todo el sistema de recogida y separación de residuos gestionado por Promedio.
¿Por qué los residuos comerciales e industriales NO pueden ir al contenedor azul o amarillo?
Los contenedores de recogida selectiva que vemos en la calle están diseñados y financiados para gestionar los Residuos Sólidos Urbanos (RSU) o residuos asimilables a domésticos (envases ligeros, papel, vidrio, restos orgánicos de consumo diario, etc.).
Los residuos generados por la actividad económica, especialmente aquellos que son no asimilables (por su naturaleza, volumen, o peligrosidad), tienen un circuito de gestión completamente diferente:
> Volumen y peso excesivo: Las planchas de madera, los palés, los grandes embalajes de plástico o las piezas metálicas saturarían rápidamente los contenedores urbanos, impidiendo su uso por parte de los vecinos y colapsando el servicio municipal.
> Riesgo para el reciclaje: Un componente electrónico, un filtro de aceite usado o una batería de vehículo (considerados Residuos Peligrosos) arruinan la carga completa de un camión de recogida selectiva. Estos materiales requieren un tratamiento especializado para evitar la contaminación y recuperar correctamente sus componentes.
> Incumplimiento normativo: La Ley 7/2022, de residuos y suelos contaminados para una economía circular, es clara: el productor inicial del residuo (la empresa) es responsable de su correcta gestión.
La Solución: Contratar a un Gestor Autorizado
Para la inmensa mayoría de los residuos generados por una actividad comercial o industrial, la ley obliga a las empresas a asumir su responsabilidad:
> Identificación del Residuo: Debe clasificar sus residuos correctamente (madera, metales, plásticos industriales, aceites usados, equipos electrónicos – RAEE, etc.).
> Contratación Obligatoria: Debe contratar a un gestor de residuos autorizado (inscrito en el registro de su Comunidad Autónoma) para la recogida, transporte y tratamiento final de estos materiales.
> Trazabilidad y Documentación: El gestor emitirá el Documento de Identificación (DI) y el Contrato de Tratamiento necesarios. Esta documentación es su prueba ante las autoridades de que ha cumplido con su obligación legal, garantizando la trazabilidad del residuo "de la cuna a la tumba".
¡Importante! Depositar estos residuos voluminosos o peligrosos en la vía pública o en los contenedores municipales se considera una infracción grave de la normativa de residuos y puede acarrear sanciones económicas muy elevadas para la empresa.
Cumplir con la correcta gestión de los residuos no es solo una obligación legal, sino un compromiso con la sostenibilidad y la economía circular. Asegúrate de que su empresa colabora únicamente con profesionales autorizados.




