Viernes 1 agosto 2025 Residuos
Nuevo camión recolector para ocho localidades de las Vegas Altas
Con una inversión superior a 200.000 euros, supone una nueva actuación dentro de la renovación progresiva de la flota que se está llevando a cabo
La ruta de recogida de residuos que incluye las localidades de Santa Amalia, Medellín, La Haba, Magacela, La Coronada, Campanario, Entrerríos y Valle de la Serena cuenta con un nuevo camión recolector destinado, principalmente, a la recogida de la fracción resto, que dará cobertura a cerca de 17.000 habitantes.
Este vehículo recolector-compactador de carga trasera, que incluye novedades en lo que a seguridad en el trabajo y reducción de impacto ambiental se refiere, ha sido presentado en La Haba, con la presencia del diputado delegado de Promedio, Francisco Buenavista; el diputado Manuel Gómez; el diputado y alcalde de La Coronada, Cristian Maldonado; el alcalde de La Haba, José González, y la primera teniente de alcalde de Campanario, Catalina Cano.
El camión es de marca Volvo y supone una inversión de 208.600 euros. La caja compactadora está fabricada por la empresa española Ros Roca, tiene una capacidad de 16 m³ e integra un sistema que pesa los residuos recogidos en la propia ruta. Su tamaño medio permite una gran maniobrabilidad, sin perder capacidad, facilitando así el acceso a trazados urbanos más pequeños y la realización de amplias rutas de recogida.
Como ha recordado el diputado delegado de Promedio, Francisco Buenavista García, “la renovación de la flota de camiones de Promedio, en la que se está realizando una inversión de 5,8 millones de euros entre 2025 y 2026, busca ofrecer un servicio cada vez más seguro y sostenible”.
Entre sus características, destacan aspectos de seguridad para el personal como las estriberas que detectan el peso del trabajador o trabajadora e imposibilitan la marcha atrás, iluminación mejorada en el perímetro del vehículo y cámara de visión trasera para visualizar la zona de trabajo de forma permanente desde la pantalla de cabina.
También resalta su bajo nivel sonoro y la estanqueidad de la caja, que evita el vertido de lixiviados (líquidos residuales de la basura) en las rutas de recogida, lo que contribuye a reducir el impacto ambiental de esta actividad.